Hay un momento en toda relación difícil en el que te paras y te preguntas... ¿Es esto normal? ¿Es sólo una fase o ha cambiado algo más profundo? Puede que la pasión que antes surgía de forma natural ahora parezca un recuerdo lejano. Tal vez amas a tu pareja, pero os sentís más como compañeros de piso que como amantes. Puede que hayas intentado ignorarlo, pero en el fondo sabes que algo tiene que cambiar.
Abandonar un matrimonio, especialmente cuando el problema es la intimidad, puede resultar abrumador. Pero antes de tomar cualquier decisión que pueda cambiar tu vida, es importante dar un paso atrás y ver el panorama completo. ¿Es algo que puede repararse o la desconexión emocional y física es demasiado profunda?
En primer lugar, ¿está usted realmente en un matrimonio sin sexo?
Aclaremos un error muy común: un matrimonio sin sexo no es necesariamente un matrimonio en el que nunca hay sexo. Los expertos suelen definirlo como tener relaciones sexuales menos de diez veces al año. Pero las cifras no lo dicen todo. Lo que realmente importa es cómo te sientes al respecto.
Algunas parejas apenas tienen relaciones sexuales, pero se sienten profundamente conectadas y satisfechas. Otras tienen intimidad de vez en cuando, pero se sienten desatendidas y emocionalmente distantes. Así que la verdadera pregunta no es ¿Con qué frecuencia mantenemos relaciones sexuales? La pregunta es ¿Estamos los dos contentos con nuestro nivel de intimidad?
Los periodos de sequía son pasajeros. El estrés laboral, los hijos, los problemas de salud, todo ello puede tener un efecto temporal. Pero cuando la falta de intimidad se prolonga indefinidamente y ninguno de los dos se esfuerza por reconectar, es cuando pueden estar en juego problemas más profundos.

11 razones que pueden estar causando un matrimonio sin sexo
El sexo y el deseo son complicados. No siempre se trata de atracción física, sino emocional, mental e incluso biológica. Si la intimidad se ha desvanecido en su matrimonio, es probable que no se deba simplemente a que uno de los miembros de la pareja haya perdido el interés. He aquí algunas posibles razones:
- Estrés y agotamiento - Cuando tu cerebro está sobrecargado de preocupaciones, es difícil estar de humor.
- Problemas de autoestima y confianza: si uno de los miembros de la pareja se siente inseguro, es posible que se aleje de la intimidad.
- Cambios hormonales: el envejecimiento, el embarazo, la menopausia o los cambios de testosterona pueden modificar la libido.
- Enfermedades o medicamentos: algunos medicamentos y problemas de salud pueden matar el deseo.
- Desconexión emocional - Si hay distancia emocional, la cercanía física puede parecer forzada.
- Depresión y ansiedad - Los problemas de salud mental suelen afectar a la intimidad de forma inesperada.
- Trauma sexual o abuso en el pasado - Un trauma no resuelto puede crear barreras subconscientes a la intimidad.
- Rutina y aburrimiento - Si el sexo se vuelve repetitivo o predecible, el deseo puede disminuir.
- Diferentes niveles de libido: que uno de los miembros de la pareja tenga más ganas de sexo que el otro puede provocar tensiones.
- Resentimientos no expresados - Los problemas o conflictos persistentes pueden crear muros emocionales.
- Falta de esfuerzo - A veces, la vida se interpone en el camino y la intimidad deja de ser una prioridad.
Uno de los mayores errores de la gente es tomárselo como algo personal. Si tu pareja no toma la iniciativa, no siempre significa que no te quiera. que. La mayoría de las veces se trata de cuestiones más profundas.
Cómo puede hacerles sentir a ambos un matrimonio sin sexo
La falta de intimidad afecta a las personas de distintas maneras. Si eres tú quien anhela más, puedes sentirte rechazado, poco apreciado o incluso indeseable. Puede aparecer el resentimiento y, con el tiempo, la distancia emocional.
Por otro lado, la pareja con un deseo sexual más bajo puede sentirse presionada, culpable o ansiosa. Puede que no entiendan por qué ha cambiado su libido, y esa confusión puede hacer que se retraigan aún más.
Esta dinámica crea un ciclo doloroso, en el que una persona se siente desatendida y la otra presionada. Cuanto más presiona uno, más se aleja el otro, y ninguno de los dos se siente realmente comprendido.
¿En qué situación se encuentra? ¿Cómo sabes si debes quedarte y trabajar en ello o si ha llegado el momento de dejarlo ir?

Cómo saber si debe marcharse o no
¿Ha mantenido una conversación con su pareja?
Sí, ya hemos hablado. ¡Es un gran primer paso! Hablar abiertamente sobre la intimidad requiere valor y demuestra que te importa encontrar una solución.
No, no hemos hablado - Entonces es demasiado pronto para tomar una decisión. Es posible que tu pareja tenga problemas de los que tú no te hayas dado cuenta. Ten esa conversación antes de hacer suposiciones.
¿Es su pareja comprensiva y está dispuesta a trabajar con usted en este tema de la intimidad?
Sí. Si reconocen el problema y quieren solucionarlo, es una buena señal. Las soluciones existen si ambas personas están dispuestas a esforzarse.
No - Si desestiman tus sentimientos, se niegan a comprometerse o no muestran interés por cambiar, es una señal de alarma. Las relaciones deben ser una calle de doble sentido.
¿Hay engaño (infidelidad) de por medio?
No - Si todavía hay confianza, hay espacio para reconstruir.
Sí - Si la infidelidad forma parte de la ecuación, eso lo cambia todo. Un matrimonio sin confianza es difícil de salvar.
¿Aún hay amor aquí?
No - Si el amor se ha desvanecido por ambas partes, forzarlo no te hará feliz.
Sí - El amor es una base, pero ¿es mutuo? Si el amor es unilateral, la relación puede no ser sostenible.
¿Has probado a darle un toque picante?
No. La rutina mata la pasión. Si aún no has intentado recuperar el entusiasmo, ¿por qué no empiezas ahora? Las relaciones duraderas suelen caer en patrones, y aunque la comodidad es hermosa, demasiada previsibilidad puede apagar la chispa. ¿La buena noticia? No hace falta un gran gesto para reavivar la intimidad, basta con estar dispuesto a probar algo nuevo.
En The Twosome Project hemos creado dos juegos innovadores diseñados para ayudar a las parejas a reconectar de una forma divertida y atractiva.
El juego del póster del sexo para rascar - Piense en él como una lista de cosas que hacer en la intimidad, pero con un elemento de misterio y diversión. Cada casilla revela una actividad única diseñada para devolver la emoción a tu vida amorosa. Ya sea una nueva postura, un reto sensual o una idea para una cita romántica, este juego fomenta la espontaneidad y la conexión.
Tease Tower™ (Naughty Jenga) - ¿Recuerdas lo divertido que era el Jenga cuando eras niño? Hemos tomado ese concepto y le hemos dado un toque adulto. Cada bloque contiene un reto sensual o una pregunta que se vuelve progresivamente más íntima a medida que juegas. Es una forma perfecta de romper el hielo, comunicar abiertamente los deseos y crear expectación.
A veces, reavivar la intimidad no consiste en esperar el "momento perfecto". Se trata de crear el entorno adecuado para la conexión, el juego y la pasión. Estos juegos brindan esa oportunidad sin presiones, permitiéndoles redescubrirse mutuamente con curiosidad y entusiasmo.

¿El problema es que quieres intimar... pero no con tu pareja?
Ésta es quizá una de las preguntas más difíciles de hacerse, pero también una de las más importantes. Lo cierto es que la atracción puede ser impredecible y, a veces, incluso en las relaciones amorosas, los sentimientos cambian. Si sientes que deseas intimidad, pero no con tu pareja, es el momento de hacer una profunda reflexión.
Empieza por preguntarte: ¿Es sólo curiosidad pasajera o es un sentimiento persistente? Es completamente natural que las personas que mantienen relaciones duraderas se fijen en los demás, pero cuando su deseo por otra persona supera al deseo por su cónyuge, merece la pena explorar por qué.
Tal vez la conexión emocional en su matrimonio se haya debilitado con el tiempo, dejándole con ganas de pasión en otra parte. Puede que el resentimiento, los conflictos no resueltos o simplemente el aburrimiento hayan apagado su atracción. O puede que sus necesidades hayan evolucionado y su pareja ya no las satisfaga.
Sea cual sea el motivo, ignorar este sentimiento no hará que desaparezca. Si te encuentras en esta situación, ten una conversación sincera contigo mismo antes de tomar decisiones precipitadas. ¿Estás dispuesto a trabajar en tu relación e intentar reavivar la intimidad? ¿O sientes que ya te has alejado emocionalmente?
Si estás luchando con esto, la terapia puede ser increíblemente beneficiosa. Un profesional puede ayudarte a desentrañar estos sentimientos en un espacio seguro y sin prejuicios, y guiarte hacia la claridad. Pero una cosa es cierta: permanecer en una relación por culpa u obligación no es justo ni para ti ni para tu pareja. La sinceridad, tanto contigo mismo como con tu pareja, es el mejor camino a seguir.
Si tus deseos se han desplazado fuera del matrimonio, es hora de que hagas una autoreflexión sincera. Quedarse por obligación no es justo para ninguno de los dos.
¿Habéis probado la terapia?
Si tiene problemas con la intimidad en su matrimonio, ¿le ha dado realmente una oportunidad a la terapia? Puede parecer un paso desalentador, pero no es el único. En el Reino Unido, los estudios sugieren que más de una cuarta parte de las relaciones son sin sexo y, sin embargo, sólo un pequeño porcentaje de parejas busca ayuda profesional.
La verdad es que la terapia puede cambiar las cosas. Los estudios indican que alrededor del 70% de las parejas experimentan una mejora en su relación después de hacer terapia, y un 90% de bienestar emocional tras una intervención profesional.
A pesar de ello, un asombroso 76% de las personas que mantienen relaciones sin sexo ni siquiera se han planteado nunca la terapia, y sólo el 9% ha asistido a sesiones con un consejero. Esto significa que muchas parejas luchan en silencio, sin darse cuenta de que existen soluciones reales y prácticas.
En la terapia no se trata de culpar a nadie ni de forzar conversaciones incómodas. Se trata de crear un espacio seguro y estructurado en el que ambos miembros de la pareja puedan expresar sus necesidades, explorar los problemas subyacentes y trabajar para reavivar la intimidad emocional y física. Tanto si se trata de asesoramiento individual como de terapia de pareja, la orientación profesional puede ayudarles a reconstruir la conexión que pueden sentir perdida.
Si aún no ha probado la terapia, ¿por qué no se lo plantea antes de tomar una decisión definitiva? A veces, todo lo que se necesita son las herramientas adecuadas y la voluntad de trabajar juntos para reavivar lo que antes parecía imposible.
Para muchas parejas, la terapia cambia las reglas del juego. De hecho, los estudios demuestran que la terapia de pareja ha ayudado a innumerables parejas del Reino Unido a reconstruir su intimidad cuando ambos están dispuestos a participar.
Reflexiones finales
Abandonar un matrimonio nunca es fácil. Pero te mereces felicidad, conexión y una relación satisfactoria. Si todavía hay amor y esfuerzo por ambas partes, hay esperanza. Y si no, está bien dejarlo ir.
En The Twosome Project creemos de todo corazón que la intimidad debe ser divertida, juguetona y excitante. Nuestros juegos picantes para parejas están diseñados para ayudaros a reconectar, explorar y devolver la pasión a vuestra relación, porque el amor debería ser siempre una aventura.